HECHOS
9-12 (sesión nº 5) Castellarnau,
3/03/2013
Conversión de Saulo 9.1-9
Ananías visita a Saulo 9.10-19
Saulo predica en Damasco 9.20-22
Saulo escapa de los judíos 9.23-25
Saulo en Jerusalén 9.26-31
Curación de Eneas 9.32-35
Resurrección de Dorcas 9.36-43
La visión de Cornelio 10.1-8
La visión de Pedro 10.9-16
Los mensajeros de Cornelio 10.17-23
Pedro en casa de Cornelio 10.24-43
Los gentiles reciben el Espíritu Santo 10.44-48
Pedro informa sobre su visita a Cornelio 11.1-18
La iglesia en Antioquia 11.19-30
Martirio de Jacobo y encarcelamiento de Pedro 12.1-19
Muerte de Herodes 12.20-25
La conversión de un
misionero 9.1-9.31
Considerar experiencias de conversión. (Recordar
cap. 3: El mundo necesita ver vidas transformadas).
Euforia exultante:
- John Bunyan: Tan lleno de alegría, que quería contárselo a la las vacas
- Charles Spurgeon: Volvió bailando a casa
- Pascal: El tiempo se detuvo por dos horas, en las que estuvo perdido.
- Resultado de lucha larga e intensa:
- C.S. Lewis: “Me rendí y admití que Dios era Dios; quizás yo era aquella noche el convertido más abatido de la cristiandad”
- Aquellos que proceden de familias cristianas comprometidas, que experimentan un cambio suave, sin nada de euforia:
- John Wesley, escuchando una exposición de la carta a los romanos, sintió su corazón “ardiendo de una manera extraña.
Convertirse no es fundamentalmente una clase
particular de sentimiento religioso. Convertirse consiste en “darse la vuelta”,
cambiar de sentido a nivel moral y espiritual.
No por lo que me ha sucedió en momento determinado,
sino por la evidencia de una vida transformada.
No hay duda de que la conversión de Pablo fue un
suceso absolutamente crucial, y en Hechos esto queda subrayado al ser narrada
en tres ocasiones.
Sabemos que Pablo se convirtió de verdad en el
camino de Damasco, no por el resplandor de luz celestial que le rodeó, sino por
el cambio radical que sufrió. El verdadero milagro fue la transformación que se
produjo en este hombre, el antes y el después. Esto es lo que la hace un modelo
de conversión cristiana.
El examen que tengo que hacerme no es si he tenido
una experiencia sobrenatural, sino si ha tenido lugar una transformación
sobrenatural en mi interior
Pablo:
La
persona que era Hechos,
9.1-2
Era un judío fanático y estaba decidió a erradicar a
aquellos herejes cristianos.Hechos 8:3
Era un
“privilegio” para él, que se le hubiera encomendado aquella misión
Sin
embargo, en sus propias palabras, al relatar su testimonio evidencia que
albergaba dudas en su interior.Hechos 26:14
Su
seguridad externa encubría un corazón asediado y divido
(Jung:
“el fanatismo se da casi siempre en individuos que están intentando compensar
sus dudas secretas”)
Sólo Dios
lo sabía y podía ver lo duro que para él resultaba el resistir el aguijón.
(Sabemos
por sus cartas, Ro. 3 Fil. 3, que interiormente, se consideraba un hombre
hundido)
No podría
dejar de estar impresionado por el testimonio de estos cristianos a los que
estaba persiguiendo.
En la
muerte de Esteban, él estaba presente, ver. Hch. 7.58-8.1
Él estaba
implicado, pero se limitó a observar, y oiría las palabras de Esteban Hechos 7:6
¿Habría
estado en Jerusalén durante la Pascua y sido testigo de la crucifixión de
Jesús?
Además,
estaba su orgullo moral. Admitir que él, Saulo el fariseo, necesitaba la gracia
de Dios, era inconcebible. Sería desechar toda aquella reputación de santidad
que había conseguido paso a paso.
La persona a la que conoció Hechos 9.3-5
Pablo
denomina este encuentro como “visión”, no fue una experiencia mística. (cf.
Cap. 22 y 26)
La luz
que Pablo vio fue real, visible y externa: sus compañeros también la vieron.
También oyeron la voz, aunque ellos no pudieron entender.
No fue un
sueño. Fue la manifestación de Cristo Resucitado (ver 1 Cor. 15)
Su base
para el apostolado la hace descansar en que
había “visto” al Señor (1 Cor. 9.1)
Lo que se
nos narra aquí, no es tan sólo la historia de una conversión, sino el
llamamiento a una misión especial de apostolado. Y esa es la razón de que fuera
un suceso tan sobrenatural.
No
obstante, hay aspectos de esta experiencia que caracterizan a todas las
conversiones:
1.
Una iniciativa divina.
Pablo no estaba buscando esta experiencia. Todo lo
contrario.
Ninguna verdadera conversión lleva a felicitarse a uno
mismo. La conversión es un acto de iluminación divina tan soberano y unilateral
como el de la misma creación.
2 Corintios 4:6
6 Pues Dios, que dijo que de las tinieblas resplandecerá la
luz, es el que ha resplandecido en nuestros corazones, para iluminación del
conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Cristo.
2.
Un encuentro personal Hechos 9:4
Una conversación de persona a persona entre él y Jesús.
Por primera vez comenzaba a haber una relación entre ellos.
La conversión va mucho más allá de lo meramente cerebral.
Incluye la comunicación con Jesús cara a cara.
Es empezar a orar, y además de la forma más íntima y
directa.
3.
Un rendición espiritual Hechos 9:5
Pronuncia
la palabra “Señor” en un tono de reverencia y temor.
No
era un enviado de Dios, ¡Era el Señor!
No
puede haber conversión sin que se dé
este momento de reconocimiento.
Un
cristiano es alguien que reconoce a Jesús como “el Señor”
No debiéramos perdernos en los detalles especiales del
llamado a Pablo, y llegar a dudar de nuestra conversión.
Si me he convertido, ha sido como resultado de la
iniciativa de divina.
Si me he convertido, ha sido porque Cristo ha hablado de
una manera personal a mi corazón, y yo he respondido a su palabra. Es algo
entre Jesús y yo.
La raíz de la conversión es un acto de rendición ante la
suprema autoridad de Jesús.
La persona que llegó
a ser Hechos
9.6-9
La conversión no siempre va acompañada de una euforia
inmediata. Para Pablo, fue una experiencia profundamente humillante.
Años después todavía hablaba así:
1 Corintios 15:9
9 Porque yo soy el más insignificante de los apóstoles, que no soy digno
de ser llamado apóstol, pues perseguí a la iglesia de Dios.
Hechos 9.10-17
17 Ananías fue y entró en la casa, y después de poner las manos sobre él,
dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde
venías, me ha enviado para que recobres la vista y seas lleno del Espíritu
Santo.
Estás son las primeras palabras procedentes de labios
cristianos que oye Pablo desde su conversión, y son palabras de afecto familiar
Quizás si nuestros oídos y nuestros corazones estuvieran
tan dispuestos como los de Ananías, nos descubriríamos siendo usados por Cristo
más a menudo para atraer a dentro a los que están fuera, transformar a los
enemigos en amigos, a los perseguidores de la Iglesia en sus misioneros
Hechos 9.17-18
Ahora sabemos, que Pablo era un hombre convertido, porque era un hombre transformado.
15 Pero
el Señor le dijo: Ve, porque él me es un instrumento escogido, para llevar mi
nombre en presencia de los gentiles, de los reyes y de los hijos de Israel;
Pablo hizo más por la expansión misionera de la iglesia
primitiva que el resto de los apóstoles juntos.
En este sentido, Saulo de tarso ya no existía.
2 Corintios 5.17
17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es ; las cosas
viejas pasaron; he aquí, son hechas nuevas.
No es imprescindible que ocurra algo extraordinario. Si
puedo confesar que Jesús es el Señor de mi vida, soy convertido.
Superando los prejuicios en la iglesia 9.32-10.48
Hechos
10:14-15
14 Mas Pedro dijo: De ninguna manera,
Señor, porque yo jamás he comido nada impuro o inmundo.
15 De nuevo, por segunda vez, llegó a
él una voz: Lo que Dios ha limpiado, no lo llames tú impuro.
Hechos
10:34-35
La Biblia
de las Américas (LBLA)
34 Entonces Pedro, abriendo la boca,
dijo: Ciertamente ahora entiendo que Dios no hace acepción de personas,
35 sino que en toda nación el que le
teme y hace lo justo, le es acepto.
El mundo
en que vivimos está formado no por mucha gente, sino por muchos pueblos y
grupos. Separados por el idioma, la religión, cuestiones étnicas, clases
sociales, sexo, aficiones, etc.
En el
libro de Hechos vemos la intención de mostrarnos una sociedad en la cual es
neutralizada la división.
No es
exagerado tildar de revolución el impacto del evangelio en aquel momento.
No había
existido en la historia un pueblo más exclusivista y xenófobo, que el pueblo
judío.
En ese
ambiente había crecido Pedro.
Además,
el hombre al que dirige estas palabras, era un soldado romano: un pagano y un
enemigo.
¿Cómo
pudo Pedro superar esos prejuicios?
1.
La
experiencia “viajar al extranjero”
Esta manera de hacer de Pedro, tal vez nos recuerda al
ministerio del propio Señor Jesús: recorrer aquellos lugares, visitar a los
creyentes, hacer milagros: JESUS SIGUE HACIENDO.
Hechos 9:43
43 Y Pedro se quedó en Jope muchos días con un tal Simón, curtidor.
Dios estaba preparando a Pedro, y usando estas
experiencias, para que se cuestionara sus prejuicios judíos.
Esto mismo puede valer para nosotros.
2.
El
discernimiento espiritual 10.9-13 la
visión de Pedro
Hechos 10:13-15
13 Y oyó una voz: Levántate, Pedro,
mata y come.
14 Mas
Pedro dijo: De ninguna manera, Señor, porque yo jamás he comido nada impuro o
inmundo.
15 De
nuevo, por segunda vez, llegó a él una voz: Lo que Dios ha limpiado, no lo
llames tú impuro.
Hechos 10:20
20 Levántate, pues, desciende y no
dudes en acompañarlos, porque yo los he enviado.
Dudar vs. Discriminar (gr.)
Pedro manifestó un discernimiento espiritual de lo que
Dios pensaba sobre el asunto.
Podemos encontrar toda clase de objetos en nuestro gran
lienzo procedente del cielo, porque todos necesitamos discernir espiritualmente
lo erróneo de nuestros prejuicios.
Solo cuando comencemos a ver el mundo como Dios lo hace,
podrán desaparecer los prejuicios de nuestras iglesias.
3.
La
experiencia de la evangelización trans-cultural. 10.29-33
Evidentemente, la ocasión para predicar era extremadamente
favorable.
Hechos 10:34-35
34 Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: Ciertamente ahora entiendo que
Dios no hace acepción de personas,
35 sino que en toda nación el que le teme y hace lo justo, le es acepto.
a.
Pedro
no está diciendo que toda persona respetable moralmente vaya al cielo. Más
tarde le habla de la necesidad del perdón de pecados.
b.
Tampoco
que todas la religiones conduzcan a Dios. No le hubiese presentado a Jesús como
Juez de toda la humanidad, 10.42-43
Pedro ahora se da cuenta de que las señales de la gracia
Dios se pueden ver tanto en las vidas de los gentiles como de los judíos
Dios disipó cualquier duda de una manera definitiva,
10-44-46 ¡Como en Pentecostés!
Este fue un momento absolutamente crucial en la vida de la
iglesia primitiva. (Aunque exactamente Cornelio no fuera el primer gentil
convertido. Nicolás y el etíope)
La explicación a la iglesia en Jerusalén, 11.1-3 11.15-17
Hechos 11:15-17
15 Cuando comencé a hablar, el Espíritu Santo descendió sobre ellos, tal
como lo hizo sobre nosotros al principio.
16 Entonces me acordé de las palabras del Señor, cuando dijo: "Juan
bautizó con agua, pero vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo."
17 Por tanto, si Dios les dio a ellos el mismo don que también nos dio a
nosotros después de creer en el Señor Jesucristo, ¿quién era yo para poder estorbar a Dios?
La reacción,
18 Y al oír esto se calmaron, y glorificaron a Dios, diciendo: Así que
también a los gentiles ha concedido Dios el arrepentimiento que conduce a la
vida.
Los cristianos no pueden ceder ante los prejuicios, porque
sirven a un Dios que no hace acepción de personas. Puede haber enviado las
buenas nuevas a Israel en primer lugar, pero las hace extensivas a todos. Por
tanto, no hay lugar en el cristianismo neo-testamentario para congregaciones
donde haya segregación. Los separatismos seguirán dividiendo a las naciones,
pero no debemos permitir que hagan lo mismo con la comunidad cristiana.
La iglesia que cambió el mundo Hechos 11.19-30
El nacimiento de la visión misionera en una iglesia,
la iglesia en Antioquía
Hechos 11:20-21
20 Pero había algunos de ellos, hombres de Chipre y de Cirene, los cuales
al llegar a Antioquía, hablaban también a los griegos, predicando al Señor
Jesús.
21 Y la mano del Señor estaba con ellos, y gran número que creyó se
convirtió al Señor.
1. Celo evangelístico de la membresía
11.19-21
Vimos como la hostilidad de las autoridades judías,
provocó la dispersión de la iglesia en Jerusalén.
Primero Felipe, después Pedro. Ahora, algunos de aquellos
creyentes llegan hasta Antioquía (capital de Siria romana, tercera ciudad más
grande el momento) una ciudad cosmopolita y secularizada.
Anuncian el evangelio, no sólo a los judíos sino también a
los gentiles (“helenos” tal vez simpatizantes)
Aquellos creyentes, por su cultura occidental, no
necesitaron una “visión” como Pedro para ser persuadidos de hablar a los
gentiles
21 Y la mano del Señor estaba con ellos, y gran número que creyó se
convirtió al Señor.
Dos aspectos a destacar en la misión cristiana:
a.
Importancia
estratégica de las grandes ciudades
b.
Importancia
estratégica de la evangelización por parte de los miembros
Fue el testimonio personal de los cristianos de Chipre y
Cirene lo que Dios quiso utilizar para a
cabo su propósito soberano.
Dios escogió utilizar el testimonio de los cristianos.
No se pueden generar verdaderos misioneros en una
congregación introvertida, centrada en sí misma.
El testimonio personal era parte de su estilo de vida. No
fue necesario capacitarlos en un centro bíblico. Como Felipe, ellos demostraron
una disposición espontánea a compartir su fe.
2. Un pastor que infunde ánimo Hch.
11.22-24
No es difícil darse cuenta que la iglesia de Antioquía era
muy diferente a la de Jerusalén: Habría más griegos que judíos.
Por tanto, no ha de sorprender que los apóstoles quisieran
asegurarse de la doctrina en esa iglesia.
En esta ocasión
(Cf. con Samaria) no envían apóstoles, sino a Bernabé (José):
Consolación.
¿Habría un propósito definido?
“vio la gracia de
Dios” 11.23,
Considerar en entorno: seguramente estarían viviendo una experiencia muy
chocante para los creyentes de Jerusalén.
Bernabé no pone ningún “pero”, “…se regocijó…”
·
Vio
vidas transformadas
·
Reconoció
que Dios estaba obrando
·
“…y animaba a todos para que con
corazón firme permanecieran fieles al Señor.”
Es poco probable que una iglesia pueda llegar a ser una
iglesia misionera, si dentro de ella no se dan dones pastorales como éste.
Son necesarios pastores así.
3. Un maestro en teología Hch.
11.25-26
Difícilmente se puede encontrar en una sola persona todos
los dones que una congregación necesita para desarrollarse.
Aquella iglesia necesitaba, además de ánimo, formación
Bernabé conocía a la persona idónea: Saulo. El teólogo.
Recluido en tarso.
·
Era
fariseo: gran conocedor de las EE
·
De
Tarso: conocía el mundo gentil.
·
Bernabé
sabía del llamado especial de Saulo.
Nota sobre la teología:
·
Hoy
se ha convertido en algo tan académico que, en muchos casos, hace más mal que
bien a las iglesia.
·
El
verdadero propósito de la teología, debería ser:
Enseñar a la iglesia cómo hablar sobre el evangelio de
manera que sea comprensible para la cultura secular.
Hombre como Pablo, que enseñen a relacionar el evangelio
bíblico con otras culturas, filosofías, idiomas… sin dejar de ser fieles a la
verdad (recordar 11.23)
4. Un corazón inclinado a la comunión Hch.
11.27-30
Muy probablemente, Bernabé enseñó a ésta iglesia el
principio de 4.36-37 a
esta iglesia.
Vemos por primera vez la comunión entre iglesias.
La expresión “local” del Cuerpo de Cristo, en comunión con
otra expresión “local” del mismo Cuerpo.
·
A
veces existe el riesgo en iglesias autosuficientes, de aislarse en la comunión
con otras comunidades.
·
Sólo
cuando los cristianos ponen en común sus recursos y se ayudan unos a otros, se
puede llevar a cabo la Gran Comisión.
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